Ir al contenido principal

Talleres artísticos y recreativos en el «Paz-Arte Bien Festival» de Lupuna – Artes amazónicas

Escribe: Connie Philipps.

El sábado 26 de agosto iniciamos los talleres del «Paz-Arte Bien Festival», que nuestra asociación cultural Lupuna – Artes amazónicas está desarrollando con mucho entusiasmo con niñas y niños del Pasaje Verónica, sector de la A. V. 28 de Julio, en el barrio Huayco de Tarapoto, dentro del programa «Barrio Seguro con Cultura 2023» del Ministerio de Cultura. Con el «Paz-Arte Bien Festival» queremos propiciar espacios de fortalecimiento de las habilidades socioemocionales de niñas y niños a través de actividades artísticas y recreativas para ayudarlos a canalizar sus emociones, y también generar alternativas de expresión y esparcimiento que promuevan la integración social y la colaboración.

Este primer taller se realizó con la asistencia de Miuler Vásquez González, quien trabajó escritura narrativa de manera lúdica. En una mañana calurosa los chicos empezaron leyendo el cuento «Yanapuma». Previa conversación sobre aquello que los asombró, recordaron las historias que se cuentan en familia, los relatos que a veces son exageraciones de los abuelos pero que remueven la imaginación de los niños; así empezaron, recordando, imaginando. Luego, anotaron las palabras que más resaltaron de los relatos que narraron, y con unas cuantas iniciaron el viaje de escribir, uniendo, enlazando, dándole cabida a la imaginación y a la creatividad. Culminaron sus relatos entre insatisfacciones («puedo hacerlo mejor», «¿me das más tiempo?»…) y risas, diciéndole a Miuler que querían dibujar para que se vea más bonito. Está de más decir que estaban orgullosos de lo que hicieron. Con niños de 6 a 12 años, ¿se imaginan los relatos?, aunque breves, llenos de misterio y sencillez.

Este sábado 2 de septiembre tendremos el taller de dibujo con Nelson Irigoin, el 9 el taller de poesía con Connie Philipps, el 16 taller de improvisación teatral con el actor y dramaturgo Julio Pareja Velásquez, el 23 los talleres de artesanía con semillas y cortezas silvestres y el taller de lectura/ mapa literario con Lucio Córdova y Connie Philipps, el 30 el taller de música creativa con Percy Aleksander Flores y finalizaremos con el festival de exhibición e integración el 7 de octubre, con participación de todas las familias, en donde se realizará el taller de ciencia recreativa con Pilar Saavedra y narración de cuentos con Gosvi Córdova y Esperanza Portella.

En el Pasaje Verónica, donde efectuamos las actividades, moran familias de escasos y medianos recursos económicos. Este sector no cuenta con biblioteca comunal (común en nuestra Amazonía) ni espacios de recreación. El campo de fútbol utilizado durante años para este fin (a tres cuadras del sector) ha sido lotizado por sus dueños y se encuentra en venta. El único parque, medianamente cercano al pasaje, se encuentra cruzando la vía de más alto tránsito de la ciudad: la Vía de Evitamiento, por donde circulan tráileres y unidades interprovinciales; por lo que no pueden acudir a jugar libremente al no contar con supervisión familiar. En este lapso, las niñas y niños suelen jugar en la calle, a la que usan como «parque de recreo». Frente a esa realidad, nuestro proyecto está haciendo posible que niñas, niños y sus familias puedan disfrutar y participar de actividades recreativas que los ayuden a desarrollar talentos, a integrarse y trabajar cooperativamente, a expresarse y opinar, a no tener temor, más allá del fútbol y el correteo en las pistas, comunes en nuestros barrios donde no se cuenta con alternativas que los alejen de los riesgos de la calle. 



Comentarios

Entradas populares de este blog

Tradición: patrona de Tarapoto

    Patrona de la Santa Cruz de los Motilones en Tarapoto       Todos los pueblos guardan en cada uno de sus habitantes diversos matices de júbilo, devoción, algarabía y festividad; motivados por la llegada de una fecha muy significativa, por lo general de carácter religioso. En la ciudad de Tarapoto se celebra la patrona de la Santa Cruz de los Motilones, fiesta que se inicia el 07 de julio y concluye el 19 del mismo mes. Cuentan nuestros abuelos, que para la llegada de esta gran fiesta, los cabezones se preparaban con anticipación casi un año. Ya sea sembrando yuca, maíz, plátano y otros productos de panllevar, así también como la crianza de gallinas, pavos y chanchos. Cuando faltaban pocos meses para la celebración, los cabezones con sus respectivos ayudantes cosechaban los productos y seleccionaban las gallinas y chanchos para esperar la llegada de la gran patrona. La primera semana de julio, las mujeres se dedicaban a la preparación del masato de yuca y chicha de maíz.  El 07 de j

Libros: El gallo gallina

El gallo gallina La novela de Oswaldo Reynoso “El gallo gallina”, editada por una editorial peruana que ha tenido a bien transcribirla de un original publicado a mimeógrafo, según palabras del autor, hace más de cinco décadas, es una verdadera muestra de ingenio, por ser un compendio de sucesos narrados en distintos tiempos y estilos literarios. Una “gallo gallina” es un gallo de pelea que se asemeja a una gallina en apariencia; con esta peculiaridad, engaña a su rival, a quien después de haber confundido y al punto de alterarle las hormonas, logra vencerlo. El de esta historia, por la trama y su mismo nombre, “Civilísimo”, es un gallo de suma importancia. Tanto su dueño, apegado a su animal al punto de llorar por él y embriagarse al máximo, el adolescente que por desgracia lo hurta, el cocinero que parece haber pactado con el diablo para obtener la receta de una pachamanca sin igual, los inoportunos apristas, los maestros oradores y sobones, los mendigos, y finalmente, el minist

El abuelo Wilmaco

Hace unos días, en Trazos, mi amigo Reymer y yo celebramos con un six pack de latas la culminación de su novela  El abuelo Wilmaco . Se trata de una historia ilustrada que habla del amor, no solo del que sentía Wilmaco por Romina y su hijo Yaro, también del amor hacia la naturaleza. Conocí a Reymer hace unos años y desde entonces hemos sido muy amigos. No. Mentira. La verdad es que casi no lo veo, pero sí hemos coincidido en varios eventos literarios y, para ser francos, siempre he admirado su determinación y compromiso con la literatura. Cuando me dijo que ya había culminado su proyecto y me envío sus escritos para leerlos, además de sentirme muy feliz de su logro, no dudé un segundo en ser partícipe de su edición y publicación. Y, ergo, he aquí el resultado. El abuelo Wilmaco  resalta a los hombres del campo dedicados al trabajo por un futuro prometedor. Pero la vida es incierta, agradable y nefasta a la vez. Esa es la vida, y Wilmaco, con sus nueve décadas, lo sabe y entiende